El mundo empresarial desde su inicio se ha entendido como un espacio exclusivo para hombres, en el cual, los más ingeniosos, astutos y emprendedores han desarrollado su actividad laboral y vida profesional dejando al margen a las mujeres.
Las empresas siempre han favorecido el crecimiento de los hombres por encima del crecimiento de las mujeres independientemente de su capacitación y su valía. No obstante, la sociedad desde hace aproximadamente una década y media, ha evolucionado gracias a una especie diferente, las mujeres emprendedoras.
Los emprendedores son personas que identifican una oportunidad de negocio y reúnen todos los recursos para hacerla posible. Deben ser personas proactivas, creativas, con capacidad de aguante frente a la incertidumbre, dedicación, compromiso, optimismo, flexibilidad y capacidad de adaptación.
Las mujeres por lo general tienen mayor capacidad intuitiva, una mejor capacidad comunicativa, mejor visión de conjunto, organización y capacidad de decisión que los hombres. El hecho de que cada año el número de mujeres emprendedoras aumente en nuestro país es consecuencia de una actitud menos sumisa y mayor valentía por su parte frente al mundo empresarial.
En México, el emprendimiento femenino tiene un crecimiento acelerado: pasó de 2.5 a 4 millones entre 1995 y 2013. Hoy en día, el ritmo de crecimiento de negocios de mujeres es mucho mayor al de aquellos realizados por hombres. Pese a estas cifras, aún no estamos en condiciones de celebrar la equidad de género en el emprendimiento mexicano.
Tres de cada diez empresas con registro ante el SAT son emprendimientos que fueron realizados por mujeres, estas son cifras aportadas por Equidad y Género del Consejo de Cámaras y Asociaciones Empresariales del Estado de México (CONCAEM).
Según datos aportados meses atrás, en el marco del Día Internacional de la Mujer Empresaria, de las 4 millones 936,000 empresas del país, aproximadamente 1.5 millones fueron iniciativas llevadas a cabo por mujeres.
Siguiendo esta línea de emprendedurismo aproximadamente 9 de cada 10 empresas Mipymes son creadas por mujeres, parámetro que también pone de manifiesto el desarrollo creativo y visión para emprender de la población femenina. El desafío que tienen estas empresas es el de viabilidad de cara al futuro, ya que la mayoría tienen una vida no mayor a los 8 años, según datos estadísticos del INEGI.
México ocupa el puesto 13 de 31 en el ranking de países que sobresalen por crear condiciones favorables para las empresarias, de acuerdo con el estudio Global Women Entrepreneur Leaders Scorecard 2015.
Deja de buscar aprobación
Eres la dueña de tu negocio y de tu idea, no busques la aprobación de aquellos que no tuvieron tu visión y valentía. Las personas exitosas comenzaron su andadura empresarial con sueños e ilusiones alocadas. El consentimiento de los demás puede ser la barrera de tu éxito y los límites de tu negocio.
Sé específica
Una buena gestión empresarial se basa en pilares y fundamentos claros y concretos. El éxito se consigue cuando se logran los objetivos y para lograr objetivos estos deben estar bien definidos, deben ser alcanzables y deben ser coherentes con la línea de trabajo de tu negocio.
Celebra hasta el más pequeño triunfo
Todo negocio está lleno de altibajos. Para conocer la victoria empresarial, debes conocer también el fracaso por lo que no desesperes si el negocio inicialmente no va lo bien que desearías. Ten la valentía y la energía para reconocer y celebrar cada pequeña victoria. Una actitud positiva te ayudará a salir de los pequeño baches y a no bajar los brazos antes de tiempo.